El corcho es la corteza del alcornoque. Y el alcornoque es un árbol de corteza rugosa y gruesa que dependiendo de los años, puede alcanzar un grosor de hasta 30 mm. Presenta hojas lobuladas y aserradas, de color verde oscuro y su fruto es la bellota.
La extracción del corcho del alcornoque es lo que se denomina «saca del corcho». Durante la época de la saca de corcho, los trabajadores denominados «corcheros" o «peladores" extraen la corteza del alcornoque cortando con un hacha y uniendo las grietas verticales del corcho. Así retiran lo que se denomina planchas de corcho.
Existen fundamentalmente dos procesos distintos para el tratamiento del corcho:
1. El primero de ellos es el utilizado para la creación del tapón de corcho de las botellas. Aunque evidentemente son muchos los artículos que pueden elaborarse con el corcho.
2. En el segundo proceso el corcho de peor calidad y los restos de las planchas de buen corcho se limpian, trituran, aglutinan y prensan para obtener un aglomerado de corcho en muy diversas presentaciones: gránulos, planchas, rollos, barras, u otras formas geométricas. Su uso es variado, desde tapones de botellas de peor calidad hasta baldosas para pisos o techos, como material aislante, como junta de estanqueidad, o en paneles ya sean acústicos, decorativos o para pinchar notas.
En mi pueblo, nos conocen como los Corchuos, debido a que vivimos en una zona de Sierra Morena rodeada por muchos de estos ancestrales árboles. Antiguamente en los campos, se utilizaban asientos de muy diversa procedencia. Uno de esos asientos, es el que presento en estas fotografías.
La materia prima son láminas de corcho que formaban parte de planchas de mayor tamaño, que han sido sometidas a un tratamiento de cocido y planchado ara poder ser moldeables.
El grosor de cada una de las láminas es de aproximadamente 30 mm y en su elaboración únicamente han intervenido:
- Corcho.
- Ramas de jara, afiladas ( atraviesan las diferentes láminas y son el punto de unión de todas ellas).
Antiguamente se usaban como asientos, hoy en día, en mi casa se ha convertido en un " puf" rústico, que nos sirve igualmente de asiento, pero también como artículo de decoración.
Eso es todo. Como siempre, espero que os guste.
Por cierto, están realizados por mi padre, de manera totalmente artesanal y sin ningún tipo de herramienta electrica.
